Al igual que las pulgas, las garrapatas son un parásito que debe evitar en su gato. Su presencia puede causar problemas en su hogar y transmitir diversas enfermedades peligrosas a su mascota. Es importante tomar medidas para evitarlas y eliminarlas si es necesario. Estamos aquí para responder a todas sus preguntas sobre cómo evitarlas, cómo combatirlas y cómo reaccionar en caso de infestación.
La piroplasmosis felina es una enfermedad relativamente desconocida, aunque puede aparecer tras la picadura de una garrapata. Los gatos también pueden verse afectados por la ehrlichiosis felina, la anaplasmosis felina y la micoplasmosis felina tras la picadura de una garrapata. Afortunadamente, estas enfermedades son raras, pero los gatos con sistemas inmunitarios debilitados son más propensos a desarrollarlas. Además, debido al calentamiento global, las garrapatas son cada vez más frecuentes, lo que aumenta el riesgo de contacto con su gato.
¿Cómo se adhieren las garrapatas a su gato?
Las garrapatas son frecuentes entre marzo y agosto o septiembre, por lo que su gato (y usted mismo) está expuesto a ellas durante la mitad del año. Pueden agarrarse cuando el gato pasea por el jardín, se revuelca en la hierba o se encuentra bajo un árbol (las garrapatas suelen adherirse a las hojas). Una vez en el pelaje de su gato, las garrapatas se adhieren a la piel y empiezan a alimentarse.
¿Cuál es el papel de la garrapata?
La garrapata se alimenta de la sangre de sus huéspedes, lo que provoca una disminución de la concentración de hemoglobina en los glóbulos rojos y puede debilitar un poco a su gato. Además, al picar y alimentarse, la garrapata puede transmitir ciertas enfermedades de diversa gravedad (aunque no siempre es así).
¿Cómo se quita una garrapata?
Al igual que en el caso de los humanos, para extraer una garrapata deberá utilizar un gancho para garrapatas, disponible en farmacias. Esta herramienta no sólo retira la garrapata en sí, sino que, lo que es más importante, retira de la piel la parte anclada de la garrapata. Si intentas extraerla con la mano o con pinzas, corres el riesgo de dejar el rostrum de la garrapata en la piel. Es importante no tirar con fuerza, sino desenroscar suavemente, como si quitáramos un tornillo. Tras retirar la garrapata, es necesario desinfectar la zona.
Sin embargo, no es aconsejable poner alcohol en la zona antes de extraer la garrapata. Tampoco se recomienda el uso de pinzas para extraer la garrapata, ya que puede provocar una inflamación o incluso un absceso. Por lo tanto, es mejor centrarse en la prevención antes de que esto ocurra.
¿Cómo prevenir las garrapatas?
Al igual que con las pulgas, es importante tratar a su gato contra las garrapatas como medida preventiva para evitar o reducir en gran medida el riesgo de infestación. Para ello, utilice un collar antigarrapatas que cuelgue del cuello de su gato. Aunque es menos eficaz contra las pulgas, este collar también puede repelerlas. Sin embargo, debe tenerse en cuenta que ciertas partes del cuerpo, como la cola o la cara interna de los muslos, no estarán protegidas por este collar.
Una opción recomendada para evitar que su gato contraiga garrapatas es utilizar una pipeta repelente de garrapatas spot-on aplicada en la nuca de su gato. Estas pipetas tienen un efecto beneficioso que suele durar varias semanas. No obstante, es esencial que consulte a su veterinario para determinar la mejor opción de tratamiento preventivo para su gato.
Conclusión
Quitar una garrapata a un gato no es tarea fácil. Se necesita la herramienta y la técnica adecuadas. Si no se retira la garrapata correctamente, se corre el riesgo de dejar la cabeza en la piel, lo que puede provocar un absceso. Por lo tanto, es esencial ser paciente y minucioso al retirar la garrapata. Sin embargo, la mejor estrategia es la prevención, anticipándose a su aparición, que suele tener lugar entre marzo y agosto.
Las garrapatas son un parásito portador de enfermedades que es importante combatir eficazmente. Para ello, se recomienda actuar con antelación mediante métodos preventivos como el uso de un collar antigarrapatas o la aplicación de una pipeta a su gato.